Desde el inicio de la Tercera Esfera de Expansión, los rumores de una nueva clase de Armadura de Combate pesada se extendieron entre las filas de la Casta del Fuego. Inicialmente no contaron con este prototipo tan esperado, pero la situación cambió tras el primer enfrentamiento importante con la expansión del Imperio de la Humanidad en el planeta de Agrellan. Los ejércitos humanos se habían concentrado y atrincherado para proteger su Mundo Colmena, una situación que normalmente hubiera provocado que los T'au eligiesen otro mundo menos fortificado. Pero este planeta era la puerta de entrada al codiciado Sistema Dovar, así que Agrellan era una pieza clave que el invasor no podía obviar; además, su órbita bloqueaba la mejor ruta a través del casi intransitable Golfo de Damocles, por lo que era necesario que fuese tomado.